El clima frío de los meses de invierno, el aire seco presente en espacios interiores y el lavado frecuente de manos para protegerse de los gérmenes tan presentes en esta época contribuyen a la deshidratación de la piel. ¿Resultado? Nuestras manos se sienten secas, tirantes, escamosas y a veces, incluso, agrietadas.

La Dra. Brea Sturm, dermatóloga en Cornerstone Dermatology & Surgery Group, entrega 7 consejos imperdibles para darle bienestar a tu piel y cuidar tus manos en invierno.

1-Hidrátate de adentro hacia afuera

Beber mucha agua puede ayudar a tu piel a mantener su barrera de hidratación natural. Ten una botella de agua a mano y bebe a sorbos a lo largo del día, especialmente si pasas tiempo en ambientes interiores calurosos y secos (por la calefacción).

2-Elije un jabón suave

Los jabones fuertes pueden despojar a la piel de sus aceites naturales. Elige jabones de manos que sean suaves, que cuiden tu piel y de preferencia con característica «hidratante” o «suave». Ingredientes como la glicerina, el aloe vera y las ceramidas son excelentes para mantener la hidratación mientras lavas tus manos.

3-Hidrata tu piel inmediatamente después del lavado

Después de lavarte las manos, sécalas con suaves toques con una toalla, dejándolas ligeramente húmedas. Aplica inmediatamente una crema de manos nutritiva para retener la hidratación.

4-Usa guantes

Usa guantes aislantes cuando estés en espacios abiertos y con frío, y guantes de goma o látex para lavar los platos o limpiar la casa. Esto evita que el agua y los productos de limpieza deterioren los aceites naturales de la piel.

5-Invierte en un humidificador

La calefacción interior puede resecar muchísimo el aire, lo que reduce la humedad de la piel. Usar un humidificador en casa, especialmente en el dormitorio, puede ayudar a mantener un nivel saludable de humedad y la piel hidratada.

6-Exfolia suavemente

Si sientes las manos ásperas y escamosas, una exfoliación suave puede ayudarte a eliminar las células muertas y permitir que tu crema hidratante penetre mejor. Usa un exfoliante suave o una toallita suave no más de una vez por semana para evitar la irritación.

7-Cuándo buscar ayuda

Si tienes las manos agrietadas, sangrantes o doloridas, es hora de consultar a un dermatólogo. Afecciones como el eccema o la dermatitis de contacto pueden imitar la sequedad invernal, pero podrían requerir tratamientos específicos como cremas o ungüentos recetados por el médico.