En nuestra vida diaria convivimos a diario con gérmenes de todo tipo, como bacterias, virus y hongos, entre otros.
Una buena parte de ellos son inofensivos y contamos con un sistema inmunitario que nos protege contra lo que pueda causar una infección. Sin embargo, algunos gérmenes logran atravesar las defensas provocando distintas dolencias en niños y adultos.
Como medida de prevención debemos tener cuidado con la llamada contaminación cruzada y debemos favorecer hábitos de higiene, con uso de agua y jabón, en situaciones puntuales.
A continuación, los expertos médicos del Departamento de Salud de Minnesota, en Estados Unidos, muestran 5 formas comunes en que se propagan los gérmenes.

De la nariz, la boca o los ojos a las manos de otras personas:
Los gérmenes pueden propagarse a las manos al estornudar, toser o frotarse los ojos y luego pueden transferirse a otros familiares o amigos. Simplemente lavarse las manos puede ayudar a prevenir enfermedades como el resfriado común o las infecciones oculares.
De las manos a la comida:
Por lo general, los gérmenes se transmiten de las manos sucias a la comida por parte de un preparador de alimentos infectado que no se lavó las manos después de ir al baño. Luego se transmiten a quienes comen los alimentos. Esto se puede prevenir fácilmente lavándose siempre las manos después de ir al baño y antes de preparar alimentos.
De la comida a las manos y a la comida:
Los gérmenes se transmiten de los alimentos crudos, como el pollo, a las manos mientras se prepara una comida. Los gérmenes de las manos luego se transfieren a otros alimentos crudos, como las ensaladas. Cocinar los alimentos crudos mata los gérmenes iniciales, pero la ensalada permanece contaminada.
De un niño infectado a las manos de los padres:
Los gérmenes se transmiten de un niño con diarrea a las manos de los padres durante el cambio de pañales. Si uno de los padres no se lava las manos inmediatamente, los gérmenes que causan la diarrea se transmiten a otras personas.
De animales a personas:
Esto se previene lavándose las manos después de acariciar animales o después de tocar cualquier superficie con la que entren en contacto.